viernes, 15 de diciembre de 2006

El gran desconocido


Micuel Nostradamus afamado personaje nacido en Francia en el siglo XVI, al que considero el profeta prolífico y exacto de la Era cristiana, el más famoso, más leído, quizás del que más se ha escrito y comentado y desde luego, al que menos se le ha entendido, del que más se han tergiversado sus intenciones y sus palabras; su obra y su persona siguen siendo motivo permanente de dudas, de injurias, de engaños, de polémicas, y después de 450 años de su publicación, y a pesar de todo esto, su obra sigue aún vigente en nuestros días.

Admirado por los muchos exegetas que ha tenido, sin que desgraciadamente ninguno de ellos haya llegado a sospechar ni a comprender el trascendental sentido y la grandeza que tienen sus escritos. Vilipendiado por otros, mal interpretado por todos, vejado, insultado y difamado por culpa de los muchos ineptos comentaristas que ha tenido, que al intentar dar una explicación a sus escritos, sin llegar a profundizar en el estudio de su obra y en el alto sentido espiritual que encierra, han provocado grandes y graves errores al juzgar a la ligera sus previsiones, cayendo en absurdas hipótesis, equivocadas apreciaciones y un sinnúmero de despropósitos en la interpretación de su obra.

Lo más curioso que ha sucedido en todos los tiempos con la personalidad y la obra de Nostradamus, a pesar de ser uno de los hombres que más tinta ha hecho derramar a las editoriales desde hace 450 años en el mundo, es que sigue siendo, el poeta, el médico, el astrónomo, el escritor, el criptógrafo y el profeta, más toscamente leído, más torpemente estudiado, más inicuamente investigado, atrozmente traducido, pésimamente interpretado, peor y mordazmente juzgado, denigrado y calumniado, visto todo esto y a pesar de todo ello, lógicamente se llega a la conclusión, que todavía sigue siendo para todos un gran desconocido, aunque sea un personaje popular y famoso en los medios de comunicación.

Notre-dame es el poeta y escritor, peor leído, más torpemente estudiado, mal investigado, inicuamente traducido, pésimamente interpretado, mordazmente juzgado, denigrado e injustamente calumniado. Por desgracia, no ha sido comprendido por nadie hasta hace unos 26 años; fue entonces, y por pura casualidad, cuando me inicié y me dediqué a la investigación de su obra, a su desciframiento, a su estudio e interpretación.

Leyendo y escudriñando minuciosamente en sus escritos, es cuando empecé realmente a conocerle, a entender y a valorar muy poco a poco y cada día más, sus geniales ideas, su incondicional entrega al trabajo, sus grandes y muy variados conocimientos, su voluntario sacrificio, su personalidad y el concepto religioso y espiritual que tenía de la vida.

Es insólito lo que ha pasado con Nostradamus y su obra, es decepcionante que después de 443 años de publicada la primera parte de su obra, no haya habido ni una sola de las numerosas disciplinas que existen y domina el hombre, como: (la Astronomía, la Astrología, la Historia, las Matemáticas, la Literatura, la Filosofía, la Geografía, la Física, ...etc.) y que los seres más preparados para estudiar y entender sus escritos, como pueden ser los monjes, sacerdotes, letrados e intelectuales, y las muy diferentes instituciones, como la Iglesia, Universidad, Ateneos, Academias, etc. no hayan investigado a fondo sus escritos para llegar comprender su extraordinaria obra.

Unos por ignorancia, al desconocer por completo sus escritos, otros por maliciosa envidia o por puro egoísmo han logrado popularidad y ganancias económicas aprovechándose de sus previsiones, otros por escepticismo, no han logrado descifrar sus claves y las verdaderas intenciones que integran su valioso trabajo, desconociendo por completo la excelsa misión que le correspondió cumplir en este mundo. Nadie ha sabido o ha querido reflexionar sobre su genial y peculiar personalidad, ni han captado las extraordinarias verdades que dejó impresas, ni intuido el valor real que encierra su legado.

Siempre suele haber excepciones: una de ellas fue Daniel Ruzo, éste gran investigador intuyó su gran categoría espiritual e intelectual y su modesta grandeza, reflejando cantidad de datos muy útiles para descifrar los escritos de Nostradame en su obra “ El auténtico testamento de Nostradamus “. Otra excepción, soy yo que le conozco y le admiro enormemente y la tercera aparecerá y seguirá la tarea para terminar lo que yo no haya podido acabar.

Notre-dame fue un hombre de una extraordinaria cultura, dotado de gran inteligencia y genial en la tarea que se propuso llevar a cabo. Este trabajo y sacrificio que se impuso libremente, de publicar unas sorprendentes previsiones dirigidas a los hombres de su futuro, para él, estoy plenamente convencido, fue una penosa obligación que aceptó voluntariamente en beneficio de los hombres que le seguiríamos, como dice en su carta prefacio a César, su hijo: Tu lejana llegada, César Nostradame, hijo mío, me ha hecho ponerme largo tiempo en continuas vigilias nocturnas para contarte por escrito, y dejarte memoria, después de la extinción corporal de tu progenitor, al común provecho de los humanos, de lo que la divina sustancia por astronómicas revoluciones me ha sido dado a conocer. Y desde que quiso el Dios Inmortal, que tú no seas venido a la natural luz en esta terrena playa, : ...y no quiero hablar de los años que tú no estarás acompañado, ni tus incapaces meses de lucha para captar en tu débil entendimiento esto que yo estaré obligado, después de mis días últimos, a diseñarte..."

Nostradame para ayudar y guiar a ese personaje, que tendrá la obligación de hallar la solución a su profética obra, al que en realidad va dirigida su carta a César, diseñó y dejó a mediados del siglo XVI, numerosos e importantes datos en muy diferentes documentos, de una forma criptográfica, esotérica y sibilina, para que llegado el tiempo adecuado ya previsto por él, (la fecha de la muerte del tirano hallado muerto, reflejada en la cuarteta 42 de la 2ª Centuria) y una vez examinados y descifrados, la comprensión e interpretación de esos datos, facilitara al sujeto destinado a resolver estos problemáticos enigmas, que después con razonados argumentos, usando la más estricta lógica, los explique y aclare, haciéndolos públicos al conocimiento general de toda la Humanidad y sirvan para el bien común de todos los hombres.

En su primer el Presagio, que es el de enero de 1555, resume en solo cuatro versos, los dos secretos más importantes de toda su obra de los muchos que dejó severamente difuminados en sus profecías. En estos cuatro versos hasta ahora nadie ha logrado entrever nada de importancia y menos que existían en ellos esos grandes secretos, ya que ese descubrimiento, es la primicia que profetizó y guardaba para el nuevo guía de sus escritos.

Le gros airain qui les heures ordenne,
Sur le trespas du Tyran cassera:
Pleurs, plaintes & cris, eaux, glace pain ne donne.
V.S.C. paix, l'amée passera.

El grueso bronce que las horas ordena,
Por la muerte del tirano se romperá:
Llanto, lamentos, gritos, aguas, hielo pan no dan.
Véase Septiembre Calendario, paz, la armada pasará.

El cambiar el tiempo o las fechas, que será lo primero para el nuevo guía, lo dejó previsto y redactado, en la cuarteta nº 97 de la Centuria XI:

Par Ville- franche, Mascon en defarroy:
Dans les fagots feront foldats cachez.
Changer de temps en prime pour le Roy.
Par Chalon & Moulins tous hachez.

Por villa abierta mi idea en desarrollo:
En los trabajos de desbroce habrá monedas escondidas,
Cambiar los tiempos lo primero para el guía,
Por cambios y vueltas todo desmenuzado.

Voy a intentar explicar paso a paso como llegué a descifrar esta grandiosa y extraordinaria maraña que entretegió el insigne médico provenzal.

En los dos primeros versos, expone la forma en que ( el grueso bronce ) - el difícil y acorazado secreto del tiempo de su cronología ? ( que las horas ordena ) se romperá con la muerte del tirano.

La identificación de dicho tirano, la aclara en la Centuria 2ª - cuarteta nº 42, y a esta cuarteta, nos lleva Nostradamus, con la primera cifra que aparece en la primera cronología dada en su carta a Henry second, - 1.242 - ( en cronologia 1º - la Centuria 2ª, cuarteta nº 42 ). En los dos últimos versos, inicia la manera de resolver el problema del hambre en el mundo.

Empecé estudiando con estusiasmo y entrega todos los escritos de Nostradamus, recapacitando detenidamente las situaciones astronómicas que en ellos presenta. Leí y medité una y otra vez el contenido de sus cuartetas y de las cartas dirigidas a César y a Henry second y principalmente llamó mi atención e investigué con mucho detenimiento las fechas que en ellas refleja.

Con gran sorpresa, conseguí desvelar el más importante de los secretos de Nostradamus, el misterio que encierra en esos dos primeros versos del presagio ya visto, en ellos intuí y descubrí el cómo había velado sutilmente las fechas de la cronología real con unas cifras aparentemente disparatadas, que a propósito dejó impresas hace cuatro siglos y medio, para lo cual, creó un módulo de transformación de sus fechas ficticias, a las reales y auténticas fechas históricas.

El hallazgo de ese módulo de transformación de sus fechas a las nuestras, creado por el llamado Mago de Salón, logré descifrarlo con facilidad, aplicando una simple regla de tres. Esto parece muy complicado y aún quimérico, pero real y sencillo de entender. Identificando y comparando, las fechas inicial y final de la cronología dada en las cartas a su hijo César y Henry second, con las fechas inicial y final de la cronología tradicional vigente, se llega a la solución con facilidad.

La solución de este problema usando el sentido común y meditando un poquito se logra, basta fijarse en el periodo de tiempo que resta desde el año 1.557, que él da como año inicial de las dos cronologías, al año final o límite de nuestra forma de cultura y civilización actual, que en su cronología, es el año 3.797, y en la cronología actual o tradicional, es el año 2.031, como explicaré.

Ese módulo de transformación de sus fechas lo ingenió, para una vez aplicado, cambiar las fechas históricas reales, por unas sofisticadas y casi increíbles cifras, que una vez transformadas en sus previsiones, le sirvieron para enmascarar y esconder, durante cuatro siglos y medio largos, las auténticas fechas de algunos sucesos históricos que narra, y después en el futuro, ya descubierto ese cómputo por su guía, lo volviera a emplear para transformar todas las fechas que ideó, aplicó y publicó, a las auténticas fechas de nuestra cronología, y de este modo pudiera garantizar los hechos históricos que en diferentes cuartetas describe.

Sus conocimientos en innumerables materias son portentosos, su ingenio único y sus previsiones extraordinarias:

Él sabía, que matemáticamente alguien lograría descifrar los dígitos que forman ese módulo, y para avalar ese hallazgo, que yo conozca y haya logrado descubrir en sus escritos, ideó siete maneras distintas de mostrar y concretar la autenticidad de ese cómputo y poder demostrar de muy diferentes maneras las cifras que lo componen.

Poco tiempo después del descubrimiento de ese módulo, me obsequiaron con el libro de Mirella Corvaja: "Las profecías de Nostradamus lo que nos reserva el futuro" publicada por la Editorial de Vecchi. Lo leí con incredulidad y mucho escepticismo al descubrir que la autora de esas páginas se inventaba fechas a su capricho, traducía e interpretaba algunas cuartetas de manera poco correcta, y además, el encontrar una serie de datos y frases, expresiones y conceptos que en los escritos del médico provenzal nunca han existido y que sin ton ni son le atribuye, asegura y dogmatiza como dichas por él, falsean por completo la realidad de Nostradamus, menoscabando la grandeza de su trabajo y la bondad y autenticidad de su personalidad.

Estas aseveraciones sin razonamiento ni justificación alguna, que después fui descubriendo sin excepción en todos los autores que han escrito y comentado algo sobre sus escritos, ensombrecen y desvirtúan la realidad de la gran misión del profeta.

Todas estas equivocaciones injustificadas para mí, me produjeron intriga y asombro, fue entonces cuando emprendí más en serio si cabe, la tarea de estudiar e investigar los escritos que en el año 1.553 y años siguientes redactó Notre-Dame.

Éste, después transformó su apellido, en Nostradamus, para conseguir de esta forma justificar el verdadero número de sus cuartetas y versos respecto a la cuantía y número de las monedas de su testamento, facilitando así la comprensión de sus claves testamentarias y señalando el camino de lograr el orden consecuente que tienen que tener sus escritos.

Las monedas, que a propósito fue acumulando durante toda su vida para preparar el desarrollo de su bien urdida trama criptográfica, y que dejó y enumeró en su testamento, con la finalidad, de que en su momento alguien se fijase en la correlación que tienen las cifras de sus diferentes monedas con el número de sus cuartetas o con el número de versos que su obra profética contiene.

Los bienes, que él declara en su testamento - que Dios Creador le ha dado y prestado en este mundo mortal, los legó: en mandas para su sepelio y sepultura, en limosnas para los pobres, en óbolos para algunas ordenes religiosas, en herencia para la niña Madelein, hija de su primo Loys Bezaudin, en legados para Diana, Ana y Madelein, sus tres hijas, para su esposa Ana Ponsard, y el resto de su fortuna, para sus tres hijos, César, Carlos y Andrés, como minuciosamente especifica en su testamento y codicilo, documentos que fueron manuscritos delante del testador por el notario Joseph Roche, con trece días de diferencia entre uno y el otro, y desde que dictó su codicilo hasta que falleció pasaron dos días y cinco horas.

La correlación de las cifras de las distintas monedas de su testamento la estudió y descubrió el escritor peruano Daniel Ruzo en su ya mencionada obra "El testamento auténtico de M. Nostradamus". Además, logró captar el contenido espiritual que contienen los escritos nostradámicos, asegurando que llegará el tiempo en que aparecerá el individuo destinado a resolver estos importantes enigmas, que equivocadamente ubica hacia mediados del siglo XXI o más. Lo que faltó a Ruzo en su obra, es justificar los 1.600 escudos dejados en pagarés, hoy día se les llama letras de cambio, y por lo tanto, no llega a explicar todas las cantidades monetarias que aparecen en su testamento.

Esos 1.600 escudos que Nostradamus dejó en pagarés (letras), no los supo justificar, ni los relacionó con el trabajo criptográfico que encierran, ni dónde el testador los incluye como parte integrante de esas claves testamentarias. Ruzo demuestra en su obra, que las monedas que depositó en metálico, se corresponden, con las cuartetas unas veces o con los versos en otras, de una forma diafana para garantizar la parte que consideraba auténticamente profética de su obra, aplaudo su visión, con alguna pequeña reticencia por mi parte, y de este modo Ruzo facilita la solución de una parte de su criptografía y del orden consecuente que deben tener sus escritos.

El profeta, con el nombre y función de la persona que eligió como notario, ratifica lo que expone en su presagio de diciembre de 1.562.

El único motivo que tuvo para cambiar su apellido por el de Nostradamus, es que esos 1.600 escudos que dejó y legó en pagarés, letras, pudieran ser justificados de forma clara como parte criptográfica de su testamento, facilitando con ellos, la investigación del orden real de sus escritos. Hay que reconocer que lo hace de forma muy sofisticada e ingeniosa, al insinuar que se haga empleando su propio nombre, pero en latín.

Al latinizar su verdadero nombre, Michel Notre-Dame, se convierte en:

M I C UEL NOS TRA D AMUS # SUMA D ART SON LEU C I M
Que..."Por el cristal..." se transforma en la siguiente orden:
Suma 500 con destreza sus unidades monetarias 100 y 1.000. -

Con la suma de las cifras que aparecen en la solución de este criptograma, se justifican perfectamente los 1.600 escudos que dejó en pagarés.

Alguien se preguntará... ¿ y porqué... por el cristal...

Por el cristal la empresa rota: Joseph Roche, su notario, en castellano significa, papel claro transparente roca, (#, el cristal) reiterando de esta manera, con la función, que este personaje desempeña en su vida y testamento, es muy importante, para la comprensión de sus secretos, y lo deja avalado de forma categórica, con la firma de un profesional. Nada menos que un notario.

En general los autores que han interpretado a Nostradamus al referirse a sus escritos, dicen lo que se les ocurre, afirmando y dogmatizando, sin el mínimo pudor ni duda que así lo dejó escrito Nostradamus, pero después ninguno de ellos argumenta, ni razona, el porqué, dónde, cuándo y cómo lo hace.

Ninguno han sabido, ni han podido razonar sobre ello; si hubieran logrado dar una explicación a sus asertos, estarían garantizadas las aseveraciones que hasta este momento se han publicado, pero todos sabemos que no es así. Nadie ha conseguido esas necesarias y determinantes demostraciones y sin embargo, las editoriales han publicado sus obras con un éxito absurdo e inexplicable.

Los libros editados sobre este tema, que unos a otros, generalizando, se han ido plagiando desde que comenzaron las interpretaciones de estos documentos, no aportan ni una sola novedad que ayude a resolver el maravilloso trabajo espiritual, intelectual, ético, astronómico y criptográfico que nos legó a los hombres que le seguiríamos.

En el primer verso del presagio de diciembre de 1.562, Nostradamus escribe y asegura: Por el cristal la empresa rota:

Esto significa y criptográficamente él lo dice muy claro: al mirar como en un cristal o espejo, algunas palabras y cifras de mis escritos, mi enrevesado trabajo de criptografía será descifrado, se romperá mi empresa.

Esta orientación, una vez comprendida y llevada a efecto, se transforma en una orden tajante y rotunda, que obliga a cumplirla para iera lograr el orden consecuente que tienen que tener sus escritos, tanto los que integran su obra profética: sus presagios, sus cuartetas y las cartas a César y Henry second, como los que parece dejó al margen, pero que sirven para orientar el desciframiento de su obra: el testamento, el codicilo, las centurias XI y XII y las Sextillas.

¿Y porqué... su nombre...? Si leemos algunas de las frases dejadas en sus cuartetas, como:

Debajo de la losa... cuarteta nº 32 de la 9ª Centuria
Grabado en mármol... presagio de junio de 1.563
El postnacido guía pone en orden el fúnebre epitafio... presagio de enero de 1.558
Por el tesoro encontrada la herencia... presagio de junio de 1.567
Y... por el cristal la empresa rota... presagio de diciembre de 1.562

Estas frases dejadas por el profeta en distintas partes de su obra, orientan y autorizan a emplear su nombre, que está en la parte baja de la losa que le cubre grabado en mármol, donde se lee el fúnebre epitafio que su nuevo guía tiene que poner en orden y por el tesoro, al emplear sus monedas de su testamento, encontrará la verdadera herencia.

Estas frases aquí destacadas, se recogen más específicamente en mi estudio aún no publicado, pero que tuve que editar para depositar y lograr su registro en la Sociedad de Autores o de la Propiedad Intelectual de Málaga el año 1.985: Nostradamus "La Verdad año 2.031".

En este trabajo de investigación sobre los documentos que Nostradamus dejó a la posteridad, que edité y registré en 1.985, se da una explicación amplia y documentada sobre los muy diferentes secretos, que la obra profética muestra y sofisticadamente a la vez esconde. Y allí se demuestra sin la mínima duda, que es el mismo Nostradamus quien enseña y facilita las pistas para hallar la solución a la mayoría de sus claves.

Que yo conozca, la única obra cifrada en el mundo y en todos los tiempos, donde el mismo criptógrafo da las claves para llegar a la solución de los enigmas que tan sutilmente expone, es la de Nostradamus y lo hace en el mismo mensaje cifrado que hay que descifrar. ¡Insólito!

Muchos de sus mensajes, tanto en prosa como en verso son difíciles de interpretar, pero si se estudia detenidamente y se medita en profundidad su contenido y el auténtico sentido que tienen, cualquiera puede lograr introducirse en este intrincado problema y resolver las muchas y variadas incógnitas que plantea el profeta.

Los documentos que voy a comentar ahora, encierran un sin fin de datos y hechos que son valiosas y auténticas primicias para los hombres actuales y para los que nos seguirán.

En todas las épocas, Nostradamus y sus escritos han provocado numerosos comentarios y muy variadas polémicas. Son multitud los escritores que han dejado testimonio de su inquietud en infinidad de textos, la mayoría con la pretensión de haber descifrado completamente los secretos nostradámicos.

Estoy seguro que he profundizado más que ningún otro en la comprensión de su obra, y nunca se me ha ocurrido pensar que he llegado a solucionar todos sus secretos.

Para comprender y sobre todo juzgar unos escritos, y más si son de la categoría de estos enigmas, lo primero que se debe hacer, es leerlos y después estudiar y meditar sobre su contenido con constancia y razonando, intentar dar una explicación a todas y cada una de las palabras que componen su obra.

Espero que este trabajo facilite el estudio y sirva como cruz de guía a quienes tengan intención de conocer y comprender la obra y la magnificencia de tan ilustre personaje.

La Humanidad merece y necesita imperiosamente la verdad clara, evidente y rotunda que demuestre de una forma u otra que Dios se ha preocupado y se preocupa de los hombres, para ello, Dios se vale de muy distintas personas y hechos. Una de esas personas es El gran desconocido, Nostradamus y las proféticas noticias narradas en sus cuartetas, la manera de demostrarlo con hechos claros y objetivos.

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